El regulador mexicano de telecomunicaciones, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), ha pedido a los operadores incumbentes de telecomunicaciones fijas en México, Telmex y Telnor, propiedad ambos de América Movil, que modifiquen sus respectivas propuestas de “separación funcional” para cumplir con las medidas regulatorias aprobadas por el IFT en marzo de 2017.

La separación funcional en México conlleva la creación de una nueva empresa mayorista (propiedad de América Móvil), separada de las operaciones comerciales minoristas de Telmex y Telnor. El objetivo de la separación funcional es eliminar, en la medida de lo posible, el riesgo de distorsión de la competencia por prácticas no de precios discriminatorias, que de otro modo podrían surgir debido a que la empresa sin separar es propietaria tanto de las operaciones mayoristas como minoristas. La nueva compañía ofrecerá, al menos, servicios mayoristas a la red de acceso de Telmex, incluyendo la infraestructura pasiva y circuitos dedicados locales, tanto a la propia división minorista de Telmex como a sus competidores en condiciones no discriminatorios.

Telmex y Telnor tienen 30 días hábiles (a contar desde el 4 de octubre) para presentar los planes de separación funcional revisados.

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